miércoles, 3 de diciembre de 2008
Compañeros ¡Bajemos el volumen!
Me he quedado sin voz. Completamente afónica. Nunca antes me había pasado, o por lo menos de un día para otro, y os aseguro que es muy incómodo. Resulta que la semana pasada acudí a eventos diversos, y en todos ellos el nivel acústico del ambiente era disparatado. Como a mí me gusta enrollarme con todo el mundo y participar en todo, forcé la voz para saludar a éstos y a los otros, me reí un montón a un volumen exagerado,etc. Total, que mis cuerdas vocales se han declarado en huelga, y lo peor es que no sé cómo negociar con ellas para que vuelvan al trabajo.Me han dado mil y un remedios, zumo de limón para hacer gárgaras, la leche calentita con miel, varios sprays y pastillitas de éstas que anuncian en la tele, pero no hay manera. Sigo sin voz.
Aprovechando esta circunstancia, quisiera pedir que, entre todos, bajemos un poquitín el volumen del mundo que nos rodea. Lo encuentro desmesurado. Cualquier tontería se convierte en un asunto de la mayor importancia, y lo peor no es ya el volumen,sino el daño que nos podemos ocasionar. Compañeros/as no nos alteremos tanto con nuestros alumnos/as hay que tomarse la vida con más filosofía.
Así que, queridas cuerdas vocales: soy consciente de que no os he cuidado mucho, pero prometo enmendarme. ¡Volved a mí, que os necesito! Es que reírse sin voz es dificilísmo. Un besazo a mis compis del CEIP, SAN SEBASTIAN.
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2 comentarios:
Espero que te recuperes pronto.
Ánimos!!!
Ups, sé de lo que hablas. Ciertamente es muy incómodo. Cuídate y, paciencia.
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